Chicas, ¿a quién no le gustan los parasoles estilosos para un rico día de playa? A mí me encantan y aquí les diré cómo llevarlos para no morir en el intento.
Expertos sostienen que las razones fundamentales que seguro han influido en esta tendencia incipiente a este lado del mundo figuran la llegada de las olas de calor –cada vez con mayor anticipación–, así como una fuerte concienciación de los peligros de los rayos del sol.
La buena noticia es que ahora ‘vuelve a estar de moda’ (y menos mal) el cuidado de la piel, problema olvidado en los años 80 y en Occidente, en general. Lo cierto es que siempre dejábamos de lado dando preferencia al ‘moreno casi negro’ a cualquier costo.
¿Porqué más es furor lucir un parasol? Obvio que la estética siempre importa y cuando el universo oriental, tal y como adelantábamos al comienzo, cada vez está más presente (no solo en moda, también en la gastronomía), un resultado como este no tardaría en llegar.
Los que saben sostienen que a estos motivos hay que añadir también la libertad que cada día más nos auto concedemos. Lejos del conservadurismo, ahora estamos viviendo una apertura al mundo en todos los sentidos que hace que en la moda también nos concedamos más licencias y que cada temporada nos atrevamos más.
¿Cómo llevarlo? Me encanta el traje de baño entero negro, chalas doradas bajas y un parasol blanco con estampados dorados y un palo de madera. Si refresca pero aún el sol está muy fuerte, puedes llevar también un saquito de playa con flecos y tela delgada. Procura de que sea blanco para que los ojos no se vayan a un sólo lugar del look sino que la atención esté repartida.
