Lo cierto es que el cambio de temporada le da la bienvenida al cambio de clóset, los géneros ligeros, las tonalidades estridentes y los zapatos abiertos se despiden. Este invierno desembarca teñido por el color óxido como gran estrella, además los abrigos oversize siguen pisando fuerte y el camuflaje vuelve adornada de accesorios.
– Militar: En Chile es moneda corriente desde hace varias temporadas, sin embargo hoy vuelve con más fuerza que nunca en un versión recargada con pins, patchs y bordados. Las parkas son las más características para plasmar el camuflaje. ¿Cómo combinarlo? Para las clásicas, con jeans rotos y camisa blanca. Si la propuesta es más osada, lo ideal es combinarla con piezas estampadas que sigan la misma estética.
– Velvet: El terciopelo puede llevarse como total look, por ejemplo con un equipo de tres piezas o el vestido negro. O con detalles como solapas, costuras o clutchs.
Algunas firmas presentan, por ejemplo, vestidos largos de terciopelo rojo con breteles finitos que tiene su gama de colores en negro y azul noche y su versión en corto.
– Flores: Este invierno se verá multiplicado en el la moda callejera: en estampas, bordados hasta monoprendas otorgándole vida a la paleta cromática.
– Faldas plisadas: Con un estética 50 son el básico sofisticado en el guardarropas femenino. En faldas son muy elegantes. Comulgan a la perfección con camisas, remeras con inscripción, stilettos o flats. El must son las faldas de color negro que pueden lucirse tanto de día, como de noche.
– Naranja oxidado. Lo cierto es que esta tonalidad tiñe todos los equipos. No es una moda para todas, y favorece a las mujeres de pieles cálidas. Para aquellas que igual quieren llevarlo, se aconseja «lejos del rostro», en faldas o pantalones
– MUST. EL oversize llegó para quedarse y es la línea preferida por las mujeres sofisticadas. ¿Cómo llevar esta moda? Con un maxi sweater tejido y querer estar la moda, unas bucaneras y una cartera de cuero te hacen un look súper trendy. Otras opciones, con leggings negras.