Los animales también tienen emociones y experiencias, que determinan su comportamiento y personalidad. Con las Flores de Bach se puede tratar las experiencias negativas que hayan sufrido, o las emociones desagradables que estén padeciendo.
El veterinario y especialista en tratamiento con Flores de Bach para caninos, Alí Reyes, dice que “los perros presentan sensaciones de miedo, soledad, ansiedad, inseguridad, apatía, hace que se produzcan desequilibrios energéticos en el organismo, para ello, es necesario realizar las terapias con Flores de Bach”.
Cuando se aplica Las Flores de Bach a la mascota
Depresión, apatía o desinterés
Adaptación a un nuevo ambiente o estilo de vida
Después de un trauma o shock, ya sea físico o emocional
Después de un accidente
Al separar al can de sus amos
Durante alguna enfermedad
Algunas de las Flores de Bach aplicadas a la mascota
Álamo temblón (aspen): se usa para aquellos animales que de repente, se muestran asustados sin ninguna causa aparente.
En algunos casos los perros comienzan a aullar, jadear, meter el rabo entre las patas, sin que podamos encontrar ninguna razón para explicar su miedo. Esta esencia ayudará a tu canino a tranquilizarse y superar esos ataques de pánico sin causa aparente.
Cerasífera (cherry plum): este tratamiento se aplica en los animales que pierden el control en sus acciones, llegando a dañarse a sí mismos o a los demás. Por ejemplo, un perro que se la lame compulsivamente una pata hasta hacerse una herida profunda.
Castaño rojo (red chesnut): es la esencia indicada para los animales que se preocupan en exceso por sus dueños o por sus cachorros, mostrándose nerviosos y temerosos de que les pueda suceder algo.
Por otro lado, el especialista explica que es importante que las personas que quieran tratar a su mascota con Flores de Bach acudan a un especialista, para que le indique la dosis adecuada y el tiempo del tratamiento.
