Chicas, lo cierto es que con el invierno temprano que vivimos en Santiago, la temporada de ski está en su mejor momento. Sin embargo, salir a la nieve requiere cierta logística, sobre todo en lo que a ropa respecta, ya que nadie quiere pasar un día entero mojado y muerto de frío en la montaña… y tampoco pasado de moda, ¿cierto? Aquí, algunos tips para que estés 100% ad hoc a la circunstancia de frío, humedad y nieve.
– La primera piel/capa cumple la función de mantener tu temperatura corporal y mantenerte seco, por lo que es importante que esté confeccionada con una tela que expulse la transpiración a la capa siguiente (por ejemplo, las camisetas de algodón no son recomendadas porque, al no repeler el sudor, se mojan y causan frío). En la parte de abajo, una calza deportiva de las que repelen la humedad o del mismo material que la camiseta es tu mejor opción.
– La segunda capa es la que te abriga. Tu elección acá depende de cuán friolenta seas: para algunas, un buzo deportivo es suficiente, mientras que otras pueden optar por polar o combinar un buzo y un chaleco para mantenerse calentitas.
– Parka y pantalón de nieve. Es imprescindible que sean impermeables y cortavientos, pero que a la vez permitan la respiración de la piel. Lo importante de estas capas es que sean impermeables, mantengan la temperatura y expulsen la humedad, pero siempre otorgando suficiente libertad de movimiento y comodidad.
– Mantener los pies calentitos y secos es clave. Entonces, es esencial tener botas de calidad que sean impermeables y de caña lo suficientemente alta para que no te entre nieve. Además, los esquiadores recomiendan medias gruesas y llevar pares de recambio, para poder cambiarlas si se mojan o se transpiran excesivamente.
– Complementos. Gorro, guantes y un pañuelo son los accesorios que sí o sí tienes que tener. Como la cabeza es la parte del cuerpo por la que se pierde temperatura más rápido, un buen gorro de lana puede ser tu gran aliado. En el caso de los guantes, asegúrate que sean de un material impermeable y térmico (bajo ninguna circunstancia elijas de lana o algodón porque se mojan). Los más friolentos además pueden agregar orejeras, o un gorro lo suficientemente largo que cubra las orejas. El pañuelo no requiere demasiadas especificaciones, aunque si te incomodan, puedes optar por una camiseta o polerón de cuello alto.