Chicas, lo cierto es que como toda prenda depende de con qué la acompañes para lucirla al máximo. Aquí te contamos cómo hacerlo, con los mejores tips.
– Para el trabajo: Las chaquetas cortas son una prenda que perfectamente podemos llevar a la oficina. Tan solo hace falta saber con qué otras prendas combinarlas para que luzcan adecuadas a la ocasión. Una linda falda lápiz o pantalones de tiro alto con una blusa o camiseta ceñida a la figura, son buenas opciones.
Si tu vestimenta de trabajo es formal procura que la chaqueta corta sea de un material o textura que puedas adoptar a ello. ¡Prohibida una de jeans, por ejemplo!
¿Y cuando comienza el frío? Sí, puedes seguir recurriendo a las chaquetas cortas también cuando bajan las temperaturas, por ejemplo, con unos jeans, un suéter cuello de tortuga, un cárdigan y un pañuelo grande o bufanda para un look de otoño invierno urbano.
– Para salir de noche: Las chaquetas cortas están muy de moda para la noche. De hecho, aquellas mini chaquetas en terciopelo o gamuza son de las más elegidas como complemento de un vestido de gala. Si me preguntan a mí, para una salida nocturna de amigas, anímate a una chaqueta corta de lentejuelas o animal print.
– Una chaqueta corta de color es perfecta para darle vida a un look básico de jeans y camiseta blanca o a rayas, por ejemplo.
– Puedes usar el cuero con prendas blancas, animal print, estampado escocés y hasta con vestidos de gala.