Todas sabemos que este tema ha sido siempre tan polémico para todos los occidentales, que se ha tratado de un problema real que no logramos entender, además del sensacionalismo con el que los medios lo han tratado, especialmente en países laicos como Francia, Italia o España que buscan declarar ilegal el uso del velo islámico obligatorio en lugares públicos. Claro, este tema es algo delicado, pero no queremos entrar en detalle sobre eso sino en cómo este tema pudo traspasar barreras culturales y se logró posicionar como una moda desde hace unos meses a esta parte.
Un poco de historia…
El velo o «el Hiyab» , pues, no se legisló como restricción ni obstáculo del movimiento de la mujer, sino como protección y defensa. Si el velo es una virtud en el Islam, lo es también en la religión cristiana. Prueba de ello es el uniforme de las monjas que cubre todo el cuerpo e incluye el cubre-cabeza y no deja descubiertas más que la cara y las manos.
Es sabido que cada comunidad tiene su carácter especial y sus costumbres particulares en la comida, la bebida, el vestido, el hogar, etc. Todo ello refleja la cultura y la creencia de cada nación que son – y seguirán siendo – diferentes hasta el fin del mundo. Como es natural, lo que conviene a una comunidad puede que no convenga a otra. Así que, por ejemplo, la mujer en India tiene un uniforme especial (El Sari) usado a todos los niveles, desde la mujer normal hasta la ex jefa del gobierno «Indira Ghandhi», y que aunque puede ser poco práctico, no ha sido criticado en los países occidentales ni se dijo que estorba a las mujeres indias de trabajar y producir.
Por otra parte, la mujer europea, hasta los principios del siglo 20, cubría en general su cabeza y se ponía una ropa larga sin ser reprochada por ello. A partir de entonces empezó a desarrollar y modernizar su vestido hasta llegar a la forma actual que no se somete a ningún criterio y que puede cambiarse en el futuro según las invenciones de las casas de moda.
Hoy…
Sí, lo cierto es que más allá de todo lo que les conté, el velo se está poniendo de moda y ha formado parte de las grandes propuestas de las pasarelas más importantes del mundo. Y, junto a estas, también se pueden ver en el street modas con este velo como protagonistas. Sin lugar a dudas, esta moda es un poco polémica, pero también creo que llegó para romper un poco con el mito y darle más realismo a lo que es llevar un velo en la cabeza.